El cansancio visual es extremadamente común. Se estima que afecta a millones de personas a nivel global y es una de las quejas más frecuentes relacionadas con el trabajo y el uso de tecnología en la actualidad.

Se podría decir que la gran mayoría de las personas que utilizan computadores, teléfonos u otras pantallas digitales durante períodos prolongados han experimentado sus síntomas en algún momento.

Los síntomas del cansancio visual (o fatiga visual digital) son variados y pueden incluir:

• Molestias oculares: Ojos cansados, doloridos, con ardor, picazón o sensación de arenilla.

• Problemas de visión: Visión borrosa o dificultad para enfocar, especialmente después de un tiempo prolongado frente a la pantalla.

• Sensibilidad: Mayor molestia ante la luz brillante (fotofobia).

• Ojo seco: Sensación de sequedad ocular, o por el contrario, lagrimeo excesivo como un reflejo de irritación.

• Síntomas generales: Dolor de cabeza, tensión en la nuca y los hombros, y dificultad para concentrarse.

Sí, pero de forma temporal y reversible.

El cansancio visual por uso de pantallas no causa daño permanente en sus ojos ni enfermedades que lleven a la ceguera. Sin embargo, sí puede afectar su visión de las siguientes maneras:

• Visión Borrosa: Es el efecto más común. Al forzar el enfoque continuo en una pantalla cercana, el músculo que controla el lente del ojo (cristalino) se cansa y pierde eficiencia, haciendo que la visión se vuelva momentáneamente borrosa al mirar de lejos o de cerca.

• Dificultad para Enfocar: Puede costarle más trabajo cambiar el enfoque rápidamente entre la pantalla, un documento o una persona a lo lejos.

• Sensibilidad a la Luz: Puede notar que la luz de la pantalla o la iluminación ambiental le molesta más de lo usual.

La clave es que estos síntomas son una señal de alarma de que sus ojos necesitan descanso. Al dejar de usar las pantallas y permitir que sus ojos se recuperen, la visión debería volver a la normalidad.

Si los síntomas persisten incluso después de descansar, es importante consultar con un oftalmólogo para descartar otros problemas de visión subyacentes, como un error de refracción (miopía, astigmatismo, etc.) que el uso de pantallas estaría exacerbando.

La disfunción de las glándulas de Meibomio (MGD, por sus siglas en inglés) es una afección ocular que afecta las pequeñas glándulas en los párpados que ayudan a producir la capa aceitosa de las lágrimas. Cuando estas glándulas no funcionan de manera eficiente, las lágrimas se evaporan más rápido y los síntomas del ojo seco pueden empeorar.